"¿Nunca te has fijado que la vida es como una serie de películas?. Bueno, tienes las de aventuras, por ejemplo, todas empiezan con problemas, pero luego los admites y te conviertes en mejor persona, después de trabajar duro. Eso fertiliza el final feliz y hace que florezca, como el final de las películas de Rocky, Karate Kid, La Guerra de las Galaxias,Indiana Jones y Los Goonies, que son mis películas favoritas..."(Pat, "el lado bueno de las cosas")
Esa frase es de una novela que me regalaron el otro día y que me ventilé entera ayer, al pasarme toda la tarde en el sofá, encerrado por culpa de un catarrazo y del clima de este invierno gallego "como los de antes" que no para de diluviar. El libro, en el que se basa la película de moda "el lado bueno de las cosas" es entretenido y me lo regalo una amiga porque según ella tengo que ver la película ya que, cito textualmente, "me pega".
Bueno, con esto del catarro al final me leí la novela (entretenida) y hasta vi la película (muy divertida). Y sí, la verdad es que me pega, me pega. Te deja buen sabor de boca y te hace buscar el lado bueno de las cosas, eso está bien, una peli divertida en la que además de reirte y babear con la protagonista femenina, te olvidas un poco de los problemas que te rodean y encima sacas alguna conclusión util. Por si fuera poco, el chalado protagonista menciona entre sus películas favoritas muchas de la mías y aún es más...¡es corredor! y dice de la canción del entrenamiento de Rocky que es "probablemente la mejor canción del mundo". Así que me ha gustado, al margen de que suelo tenerle manía a las películas demasiado famosas o muy nominadas a premios y esas cosas, como es el caso.
Cambiando de tercio, y viendo que hace tiempo que no cuento mi vida. El pasado fin de semana fui a Vigo, a ver a amigos y familia, a correrme una juerga de noche el viernes, pasar el día de tapas/cañas el sábado y el domingo pegarme una comilona con mi hermana y mi cuñado.
Claro que, siendo como soy, saqué unas horas el domingo por la mañana para un pequeño entrenamiento con el montañero Chedo ("el-hombre-al-que-le-debo-haber-hecho-el-maratón"), se trataba de hacer "unos kilómetros" de montaña...¡Carallo con los kilómetros! al final salieron 24 km de nada, con tres "ultreros"acostumbrados a maratones de montaña y yo resoplando detrás (pero aguantando el tipo). Desde Moaña hasta el punto más alto de la península del Morrazo, desde donde se veía toda la Ría de Vigo, Pontevedra, Islas Atlánticas...una maravilla. Solo me metí dos leñazos fruto de mi torpeza, las zapatillas inadecuadas y el barro hasta los tobillos, pero nada importante, aparte de volver (otra vez) a tener las uñas negras. Cualquiera que corra sabe de qué hablo. Después de la paliza, el papeo con mi hermana vino como agua de mayo, claro.
Al margen de las agujetas y las uñas negras, lo importante es que lo pasé muy bien y fue un buen entrenamiento. ¿Planes atléticos?... con mi típica indecisión (el ultrero Pedro me echará la bronca) sigo sin saber qué demonios quiero hacer: carreras de montaña; medias, maratones; cross....¡es que me gusta todo! así que de momento seguiré a salto de mata, apuntándome a lo que me apetezca, aunque me he puesto como objetivo preparar "un poco bien" la Vig Bay, esa media maratón "especial". Y después...quién sabe, igual repito el maratón de Coruña (lo más probable) o me lío la manta a la cabeza y me apunto al MAPOMA (Madrid), con la intención de acabarlo, que dice un amigo que un español que no haga el MAPOMA no se puede llamar maratoniano...Aunque eso quizá lo deje para el 2014.
Así que nada, nada, a darle caña a esforzarse y, como dice el protagonista de la película: A convertirse en mejor persona después de trabajar duro.
Saludos y eso, a ver el lado bueno de las cosas, que las películas pueden tener final feliz aunque no lo parezca.
Solo con verte dar esos carajazos por el monte , ya te tenemos que llevar , un dia te vienes con nosotros , jajajaja.
ResponderEliminarpedro.