NUEVA MECÁNICA

Aquí estamos hoy, bajo aguaceros interminables y en plena "ciclogénesis" osea, ventarrón. Está la playa preciosa, las olas rompen desde lejísimos y la espuma blanca llena toda la ría. El viento sopla tanto que los árboles del pinar hacen un ruido tremendo, además las hojas de los plátanos vuelan de un lado a otro y tienen un color dorado, propio del otoño, que hacen que esté todo realmente bonito. Me gusta el sol, claro, pero estamos en Galicia y es otoño, lo bueno de este lugar es que es bonito en cualquier época del año.

Hoy es día de transición, tengo que estar pendiente del teléfono para saber la fecha exacta de firma del contrato laboral y no me puedo dedicar a corretear, nadar o machacarme hasta que no reciba la llamada, esta semana otra vez a currar, ¡qué bien!. 

No viene nada mal un día de descanso muscular, la verdad, llevaba varios días haciendo tiradas largas y encima nadando, por lo que estoy agarrotado, pero necesito acumular quilómetros de cara a mi primer medio maratón, para el que queda poco más de un mes. 

Como llevo toda la mañana "vegetando" aproveché para leerme un pequeño libro que me han regalado la semana pasada, "LA MECÁNICA DEL CORAZÓN", de Mathias Malzieu, escritor y cantante pop francés. Es un librito agradeble, una especie de cuento para mayores la mar de romántico y muy curioso. El protagonista se pasa las casi doscientas páginas de la novela enamorado hasta las trancas de una bailarina miope y enlazando los estados de rabia, dolor, insatisfacción, tristeza y alegría sin dar respiro, no debe ser fácil escribir algo así. Uno lo lee y se imagina los personajes tal y como los reflejaría Tim Burton en una de sus películas, sin embargo la versión para la gran pantalla la va a realizar Luc Besson, el de Moulin Rouge. Será porque es compatriota del escritor. Es un libro recomendable. 

Volviendo a las correrías, acabo de charlar con un compañero corredor que está estresadísimo con cómo entrenar ahora, en invierno, con los días tan cortos. La verdad es que es un asquito que anochezca tan temprano. A mi me encanta hacer series en el pinar de Cabañas, pero va a ser imposible ahora  entre semana. No hay nada de luz a partir de las 18.00 horas y es un riesgo muy grande correr sin ver bien en un circuito repleto de raíces, piñas, charcos, ardillas o vaya usted a saber. Habrá que organizarse. No me gusta hacer series solo, pero con el nuevo horario laboral y de luz, no me queda más remedio que acostumbrarme. Habrá que hacer series por el paseo, que al menos está algo iluminado, una vez por semana, algún cambio de ritmo otro día, una tirada larga otro  y dejar los fines de semana para confraternizar con el resto de la panda, a lo mejor institucionalizamos una visita a las pistas de atletismo de Ferrol los viernes por la tarde y matamos dos pájaros de un tiro, hacemos series y vida social. Ya veremos. 

El caso es seguir adelante, SIEMPRE, hoy que llueve tanto no puedo evitar repetir uno de nuestros mantras: NUNCA CHOVEU QUE NON ESCAMPARA (nunca llovió que no escampara).