DESAFÍOS...

"...sólo los que se atreven a llegar lejos, son capaces de llegar a saber lo lejos que pueden llegar..."
T.S. Elliot

sábado, 19 de marzo de 2011

Triatlon made in "feito na casa"


El jueves estaba picado. Una compañera de trabajo, corredora para más señas y que me da un repaso en cada carrera en que coincidimos para ser aún más detallista, comentaba en el café su plan de entrenamientos para la temporada de triatlones. Mientras ella narraba lo bien que se lo pasa rodando sólo 70 km en bici por la mañana para estar fresca por la tarde y poder hacer una carrera de 10.000 metros a 4 minutos el km yo empezaba a tener agujetas solo de pensar que esa tarde me tocaba entrenamiento de series. 

En este deporte (como en todo en la vida) las cosas que se logran con esfuerzo dan más satisfacción, así que me propuse no flaquear en las famosas series. Cuando ya estaba totalmente motivado me informaron de que no tenía compañero de series. Mi gozo en un pozo ya que soy negado para hacerlas solo, es lo que hay.  Así que pasé al plan B (siempre digo que hay que tener un plan B, plan C y hasta plan D, así malo será que no cumpla alguno).   Este plan B es muy fácil, consiste en empezar a correr y a ver qué pasa, si la cosa va bien puedes acabar corriendo más de hora y media, o haciendo cuestas a lo bestia, cambios de ritmo....nunca se sabe. 

Pues mientras trotaba bajo el sol por este magnífico pinar y playa que tenemos en Cabañas, se me ocurrió hacer un triatlón "feito na casa", cambié el orden de los factores (que en este caso sí que altera el producto) y me puse a ello. Si el triatlón sprint consiste en nadar 750 metros, pedalear 20 km y después, de propina, correr 5000 metros, sin descansar, yo como ya había corrido 7,5 km, decidí coger a bicicleta y hacer 20 km. Se me echó la noche encima así que me quedé en 15, pero para compensarlo, fui a la piscina y nadé 42 largos, más de un km. No es que hiciese unos tiempos como para estar orgulloso de ellos, pero llegué a casa más feliz que unas pascuas, encantado de mi entrenamiento. 


Hoy  era el día del padre, y encima sería el 84 cumpleaños del  mío, ahí es nada. Podría haber sido un día triste o melancólico, pero como en esta vida todo depende de la actitud de uno mismo, decidí que fuese un día feliz,un homenaje. Por la mañana ruta ciclista por las Fragas del Eume con subida al Castillo de los Andrade  incluida (la leche, vamos) y posterior trotecillo para soltar piernas. después de un aperitivo en el chiringuito, disfrutamos de una tarde playera en toda regla, esto es: bañador de flores, castillo de arena con las niñas pequeñas, baños, charla, saludos, sol, sol y más sol.  agotado estoy, así que en vez de salir, me trago un clásico cinematográfico (orgullo y prejuicio toca hoy) y a intentar dormir 7 u 8 horas, que mañana tocan 18 km de carrera y la semana laboral viene cargadita...

2 comentarios:

  1. Para mi ha sido el primer día del padre sin padre, entiendo lo que dices.
    Yo también soy del que llevo varios planes en el bolsillo.
    Es curioso yo también creo que tenemos una forma parecida de ver las cosas, pero no estoy de acuerdo contigo, tus entradas son mejores

    ResponderEliminar
  2. Gracias alex, y ánimo con ese desafío 8tú mira hacia el cielo y ya está) y con todo.

    ResponderEliminar