“Piensa que el futuro es como una acuarela y tu vida un lienzo que colorear…" Decía el brasileiro Toquinho en su canción. Es una de mis canciones favoritas, en cualquiera de sus versiones. Tanto la música como la letra son fantásticas. “La esperanza jamás se pierde, los malos tiempos pasarán” deberíamos cantar todos los días, “basta un desearlo y podrás recorrer todo el mundo…” vamos, lecciones para la vida diaria, un canto al optimismo y a la búsqueda de lo que deseamos. Como todas las canciones, películas y libros que me marcan, me transporta a la infancia, a un mundo de colores, esperanza y felicidad, ¡basta de grises!.
Ayer fui al funeral del pintor ferrolano Adriano Paz. Era amigo de mi padre y de su quinta (un par de años más joven). Su familia veraneaba en Cabañas, donde yo vivo, cuando yo era pequeño y aunque hace años que no vienen por aquí, los hijos aún me saludan con mucho cariño cuando me ven. Pobres, sé lo que están pasando y me acuerdo mucho de ellos, ¡qué mal se pasa aunque sea algo esperado!.
Como buen ferrolano la vida de Adriano estaba relacionada con el mar ya que era proyectista naval y civil y trabajó en la industria naval poniendo una nota artística en los muchos barcos en cuya decoración participó. Hasta hace muy poco, con ochenta años cumplidos, aún podía verse a Adriano paseando y tomando apuntes para nuevos cuadros. Su familia y amigos le tendrán siempre presente, tanto en su recuerdo como en sus obras.
Como humilde homenaje expongo alguna de sus magníficas acuarelas, que suelen representar motivos marinos y reflejar los entrañables paisajes de la comarca de Ferrol y la Ría de Ares (¡mi ría!).
Además, cuelgo la canción de Toquinho, que al igual que las obras de Adriano Paz es una maravilla y como sus acuarelas, deja buen sabor de boca.
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